El «programa para padres y niños de Praga» PEKiP
El programa para padres y niños de Praga se basa en la formación de grupos especiales para padres y niños. Las reuniones periódicas sirven para seguir el desarrollo de los bebés durante su primer año de vida.
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Es curioso constatar que en esta época, en la que tantas cosas cambian constantemente en la pedagogía, el «programa para padres y niños de Praga» (PEKiP) se mantenga inalterable desde hace relativamente bastante tiempo.
En Europa, los padres y madres de los grupos PEKiP vienen reuniéndose desde el año 1973.
¿Qué es el programa PEKiP?
El programa para padres y niños de Praga se basa en la formación de grupos especiales para padres y niños. Las reuniones periódicas sirven para seguir el desarrollo de los bebés durante su primer año de vida. La primera reunión se efectúa cuando el bebé tiene por lo menos de cuatro a seis semanas de edad.
Estos grupos suelen permanecer estables durante todo el año, es decir, que se encontrarán siempre los mismos bebés. Y esto es muy importante para que los pequeños puedan sentirse cómodos con este primer grupo de amigos.
El grupo se reune una vez a la semana bajo la dirección de un/a jefe/jefa de grupo. El lugar de reunión debe ser confortable y lo suficientemente cálido como para que los bebés puedan estar desnudos. Las reuniones duran 90 minutos. Los padres aprenden en ellas diversas formas de estimular los movimientos con el objetivo de que en cada momento puedan aplicar los estímulos más apropiados para su hijo/a. Las reuniones duran 90 minutos.
Grupos PEKiP (Pragen Eltern-Kind Program) Objetivos:
• Acompañar y apoyar al niño durante su desarrollo mediante el estímulo de sus movimientos, sentidos y juegos.
• Reforzar la relación entre el niño y sus padres.
• Posibilitar y potenciar el intercambio de experiencias entre los padres.
• Facilitar que el niño entre en contacto con otros niños de su edad así como con otros adultos.
En la actualidad hay en Alemania más de 30.000 bebés que participan en los cursos PEKiP en compañía de sus padres o madres. La demanda de estos cursos ha crecido tanto en toda Europa que desde 1978 se organizan también cursos para directoras de grupo.
Apuntes tomados del libro “Juegos con bebés” (Editorial Hispano Europea) de Anne Pulkkinen pedagoga y experta directora de grupos que trabajan en la estimulación de bebés, nacida en Finlandia, pero que realiza actualmente su trabajo en Alemania.
Los bebés y sus talentos ocultos
«En los niños se ocultan unas capacidades increíbles de las que hasta ahora no teníamos ni la más remota idea». Ésta era la hipótesis enunciada por el psicólogo Dr. Jaroslav Koch en Praga en los años 60, pero apenas tuvo seguidores. La mayoría de sus colegas suponían que durante sus primeras semanas de vida los bebés son totalmente incapaces de todo.
Pero el Dr. Koch estaba convencido de que los bebés son capaces de muchas cosas si se les proporcionan las condiciones idóneas para su desarrollo. El Dr. Jaroslav Koch estudió psicología en Viena y Praga. Hasta su muerte, acaecida en el año 1979, se ocupó del Instituto para madres y niños de Praga. El eje de sus trabajos científicos fue el estudio del desarrollo del niño durante su primer año de vida.
Este psicólogo consideraba que el movimiento es uno de los factores fundamentales: en uno de sus estudios comprobó que los bebés eran más felices y se desarrollaban mejor si se jugaba mucho con ellos de forma que pudiesen estar mucho rato en movimiento. También se dio cuenta de que los bebés se mueven mucho más si están desnudos que si están vestidos.
El Dr. Jaroslav Koch consideraba que era muy importante que los bebés pudiesen estar mucho rato desnudos y que pudiesen moverse libremente por el suelo de la casa. Para él, la libertad de movimientos era tan importante para el desarrollo del niño que a su proyecto lo denominó «Desarrollo a través del movimiento”. El Dr. Koch concibió diversos estímulos para el juego y la movilidad. Pero estos factores no estaban destinados a acelerar el desarrollo del niño, sino solamente a favorecerlo. A los bebés no se los mueve de una forma pasiva, sino que se les proporcionan los estímulos necesarios para que sean activos por sí mismos.
La psicóloga alemana Dra. Christa Ruppelt conoció al Dr. Koch en un congreso de psicología celebrado en Viena en 1964 y en el que éste exponía los resultados de sus investigaciones. En esa época, la doctora Ruppelt estaba intentando dar con el modo de apoyar a los padres en la relación con sus bebés. Esta psicóloga, entre otras cosas, había trabajado durante años en un centro de orientación familiar y sabía que muchos padres se sienten totalmente desamparados con el recién nacido: se encontraban solos con su inseguridad en el día a día y se planteaban muchas cuestiones sin obtener respuesta. Y ella se proponía ayudar a estos padres jóvenes.
La Dra. Ruppelt acompañada por su pareja el sociólogo Hans Ruppelt empezó a aplicar los descubrimientos del Dr. Koch y de manera divertida y agradable desarrolló un método de trabajo para grupos de padres y niños. Y es así como un concepto surgido en Praga que empieza a extenderse por Europa y como con el paso del tiempo, este método se ha convertido en un concepto pedagógico estable.