Unidad 4

Cuando nuestro hijo es un niño activo, que toca todo, lo coge, y a veces lo tira al suelo, los papás muchas veces nos enfadamos, porque hace polvo una serie de objetos que a nosotros nos parecen necesarios o nos son útiles. Y así comienzan los regaños: ¡Deja eso! ¡Estate quieto! ¡No toques mis cosas! ¡Eres muy malo!... Pero lo bueno es que el niño este activo, atento a lo que le rodea, porque un niño demasiado quieto, que no muestre interés, es casi seguro un niño enfermo.

En esta Unidad tienen ustedes indicadas una serie de actividades para que las realice con su hijo, cuando las haya realizado bien, lleve al niño al Centro de Salud, al Programa de Control del Desarrollo Infantil.

Actividades

1. Si en la casa hay una mesa pequeña proporcionada a la altura del niño, regálesela al niño y prepárela así: Lije bien la superficie de la mesa y luego píntela con pintura verde mate para tableros. Déjela secar, y compre unas tizas, mejor si son de colores. Si no tiene una mesa en la casa, puede hacerla con una caja de madera, colocada boca abajo y quitándole dos laterales.

2. Deje que el niño pinte en la mesa lo que quiera. Al principio solo hará garabatos, pero fíjese bien que mano es la que más usa para pintar. Enséñele a hacer bolitas y palos.

3. Jueguen con él a golpear la mesa con ambas manos siguiendo el ritmo de la canción: "Los pollitos dicen pío, pío, pío", "Tengo una muñeca vestida de azul".

4. Mire con el niño revistas viejas, periódicos, y que el niño recorte con las manos las imágenes que le gusten. Que aprenda al nombre de cada objeto recortado.

5. El niño debe empezar a comer solo. Sírvale la comida en un plato hondo y déle una cucharita. Que él coja la cuchara con la mano que quiera. Esté usted junto a él mientras come. Déle las comidas a horas fijas. Déle un plátano, mandarina, pera, manzana, kiwi, ciruela (o la fruta que se consiga en cada estación) después de cada comida, todos los días.

6. Jueguen al "Cangrejo": avanzar, sentado en el suelo, hacia adelante y hacia atrás, impulsándose con las manos.

7. Para que el niño controle su deposición o defecación, acostúmbrelo a sentarse en la bacinilla, explíquele como usted, su papá, sus hermanos, lo hacen igual. Enséñele que debe decir “caca” cuando tenga deseos de defecar. Atienda su llamada.

8. Jugar al "Barrilito": acostado en el suelo dar vueltas con los brazos extendidos.